1. Desinhibirse y vencer la timidez: Enfrentarte poco a poco al público te ayuda a vencer la incomodidad que genera ser observado.
2. Mejorar las habilidades de psicomotricidad: La expresión corporal te permite dar movimiento al cuerpo y sus articulaciones explorando movimientos poco habituales y ayudándote a tener un mejor control y manejo de tu centro de gravedad. 
3. Hablar en público: El trabajar en el dominio de la voz como herramienta de comunicación; te permite entrenar tu respiración, vocalización, dicción y proyección. Así como explorar el uso de tus emociones y energía para expresar correctamente lo que deseas comunicar.
4. Mejorar las habilidades sociales: Al ser un trabajo de equipo, te permite conocer gente, ponerte en el lugar del otro, superar el temor al conflicto y al contacto físico y crear lazos de amistad.
5. Reforzar la autoestima: Te ayuda a conocerte y reconocerte, a aceptarte tal y como eres y, a valorarte con todo e imperfecciones. El superarte en cada ensayo te da seguridad y, el reconocimiento del público al final de cada función, es un regalo que da confianza y te impulsa a seguir. 
6. Ruptura de tabúes y paradigmas: Te permite explorar el mundo interior de otras personas al enfrentarte a situaciones desconocidas y obligarte a defender sus ideas como propias.
7. Jugar: Te ayuda a desarrollar tu imaginario teatral y te permite dejar salir al niño que llevas dentro, permitiéndote explorar y descubrir otros mundos.
8. Libertad: Te permite volar, dejar de lado las estructuras marcadas por la sociedad y mostrarte tal y como eres, soltando el peso de las emociones “guardadas”, expresándolas y dejándolas en libertad.
9. Conocimiento y Aceptación personal: Al desnudarte emocionalmente en cada clase, te acercas a tu mundo interior, te descubres y te facilita entenderte. 
10. Magia: Te permite vivir esta suerte de “ilusionismo” que te hace creer en este mundo imaginario maravilloso, donde se involucran emociones y pasiones, entregándote diversión y haciéndote feliz y pleno en lo que haces.

No hay edad mínima ni máxima para hacer teatro, esta disciplina es una excelente alternativa para grandes y chicos. Así que no lo pienses más y disfruta de sus beneficios. ¡Haz Teatro!¡Vive el Teatro!